2 Visiones y consejos para las sesiones fotográficas (1ª Parte)
La primera de las visiones que hay que tener en cuenta, y principalmente sobre la que realmente se basa el trabajo fotográfico es la visión del modelo.
Siempre hay que averiguar ¿qué es lo que busca?, ¿qué es lo que quiere obtener?, ¿con qué fin son las fotos?, book profesional, personales, regalo, ¿averiguar sus posibilidades como futura posible modelo?.
Obviamente estas preguntas vienen algo grandes cuando se está empezando a mover en el mundo fotográfico y se tira de los TFCD, para pulir técnicas, control, esquemas de luces, etc. pero al tiempo y según vas buscando un nicho de trabajo van surgiendo. Otro asunto, al que no voy a entrar es del círculo que se genera por sacar beneficios económicos o de otras índoles de esta modalidad de realizar fotos.
Una vez que nos contacta, o contactamos, con una modelo nos indica el tipo de sesión que quiere, el tipo de fotos, aunque muchas veces las indicaciones son “dime tú, eres el fotógrafo”, en mi caso me contactó en una ocasión una cantante para realizarle las fotos del disco y de publicidad, me pasó las pruebas de sus canciones y me dijo que lo escuchase para inspirarme. Tras escuchar el disco en varias ocasiones, nos reunimos nuevamente y le propuse mis ideas para el tipo de fotografías, localizaciones, montajes, maquillajes etc etc, finalmente no llegamos a concretar nada ya que mis influencias fotográficas y de estilo son más oscuras que lo que ella buscaba realmente, de más luz y etéreo.
También indicar que en muchas ocasiones, cuando hablas con la modelo o el modelo para ver el tipo de sesión, conviene saber si la sesión que se busca, la idea plantearla para exteriores o estudio, pues obviamente los resultados no pueden y no serán los mismos. Si quiere fotomontajes para fotografías de fantasía, retratos, fashion (hay que tener en cuenta que muchas veces para ciertos tipos de estilismos es mucho mejor exteriores para darle ese punto de originalidad), que los modelos también necesitan sus book, en algunos casos para presentar a agencias.
También es conveniente, si se termina realizando un book para agencia, que se tengan estilos muy diferentes, y si puede ser de fotógrafos diferentes, ya que en muchos casos cada uno tendrá una visión diferente del modelo al que le haya dado parte su que hacer propio.
En algunas ocasiones cuando se busca a un fotógrafo para X tipo de sesión, aparte de tener en cierta medida qué tipos de foto se quiere, también es aconsejable tener a disposición el estilismo que se quiere para la sesión, o la que el fotógrafo a pedido. Si se acuerda una sesión de moda, y la ropa que se trae es de (por poner un mal ejemplo) de la ropa que está “de moda” para salir un viernes, pues el trabajo previo que pudiera haber hecho el fotógrafo se ve truncado al no ser igual una iluminación para, sirva solo como ejemplo, vestidos largos, camisas de raso, tacones, quizás un peinado más preparado, y un maquillaje diferentes (muchas modelos ya se auto maquillan en algunos casos), esto no es igual que venir con unos leggins, vaqueros, una camiseta de red, un par de toreritas y un maquillaje algo ligth (pues hay que tener en cuenta que a nivel fotográfico en muchas ocasiones hay que exagerar el maquillaje para que quede representado y no se pierda bajo las luces, pero sin que parezcan puertas con 4 capas).
Desde luego nadie nace sabiendo y hay que empezar de algún modo, y su trabajo tiene, muchas veces por mantener unas medidas, tener un fondo de armario muchas veces que es para perderse, con el coste que conlleva, llevar y traer la maleta con “el cargamento”. En muchas ocasiones no salir ni trasnochar las noches antes a una sesión para que no se marque un cansancio que no quieren que se refleje, ojeras, a veces hasta algún moretón de un mal golpe recibido o algún traspiés, y tobillo torcido ¿y ahora?, ¿sesión perdida?. En algunas ocasiones no se aprecia el trabajo que conlleva estar delante de la cámara, los esfuerzos de memorizar poses, movimientos, el llegar a expresar aquello que se les pide en la sesión, miradas, contoneos, expresiones, gesticulación y ya cuando se les añade atrezzo más aún ese saber estar y ponerse en situación.
Otras veces vienen de escuelas de moda, con intenciones, un futuro lleno de gloria y pose, con la cabeza llena de ideas, ilusiones, y no negarlo en algunas ocasiones puestas una venda en los ojos porque “están en una agencia”, yo desearía que algunas modelos profesionales dieran charlas o de algún modo comunicasen su devenir para llegar donde están y cuantas quedaron en el camino, que ellas mimas vieron que eran engalladas para sacarle los cuartos, aunque más socialmente correcto es decir “ no le vamos a destrozar su sueño”. No están todas las que son, ni son todas las que están, pero “por no destrozar” su sueño dejarlas que se crean, luego puede pasar que vengan divas y no salgan del barrio más que unos meses.
Estar en esta parte de la cámaras es un mundo dificil, donde la competencia por destacar hay que reconocer que es feroz, por eso cuanto antes se tenga claro las tendencias a las que se quiere llegar, o al menos el abanico que se quiere abarcar. Un modelo no vale igual para una sesión estilo Massimo Dutti, que para una de corte Mad Max. Aunque al modelo en si en muchas ocasiones le convenga tener ese amplio book para mostrar sus distintas facetas, hay que saber a qué se saca mayor provecho de uno mismo.
Y ahora os pregunto, ¿creéis que parte del trabajo fotográfico al que se someten los modelos, sesiones, maquillajes, dietas, estilismos les compensa, a qué nivel?.
